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La dieta mediterránea: algo más que una dieta, un estilo de vida

Si hubiera que definir en pocas palabras qué es la dieta mediterránea, podríamos decir que es la unión de buenos ingredientes, cocinados de forma tradicional y disfrutados en buena compañía como suele hacerse en los países mediterráneos. Para finalizar un buen paseo a poder ser también en compañía ¿Se puede pedir más?

Centrándonos solo en la parte nutricional y siguiendo las recomendaciones de la “Fundación dieta mediterránea”, entidad sin ánimo de lucro creada en 1996 para la promoción e investigación de la dieta mediterránea, en nuestra alimentación deberíamos consumir de manera abundante alimentos de origen vegetal (pan, pasta, arroz, verduras, legumbres, frutas, frutos secos…), de forma moderada pescados, mariscos, lácteos, aves y huevos, en pocas ocasiones carnes rojas y solo ocasionalmente algún dulce. Todo ello cocinado con un buen aceite de oliva y acompañado de un buen vino.

La dieta mediterránea se basa en 10 recomendaciones básicas:

  1. Introducir alimentos de origen vegetal en cada comida principal.
  2. Consumir a diario alimentos derivados de los cereales.
  3. Consumir a diario lácteos, principalmente en forma de queso y yogurt.
  4. Consumir 3 raciones de pescado (sobre todo azul) y de carne blanca  y 3 o 4 huevos a la semana.
  5. Reducir el consumo de carne roja a 2 raciones por semana.
  6. Elegir como postre la fruta fresca, dejando solo para alguna ocasión los dulces.
  7. Tomar vino moderadamente acompañando las comidas.
  8. Utilizar el aceite de oliva como principal grasa.
  9. Optar siempre que sea posible por los alimentos frescos y de temporada.
  10. Realizar alguna actividad física a diario.

 

 Dieta mediterránea

Dieta mediterránea

Esta forma de alimentación aporta muchas grasas insaturadas (provenientes del aceite de oliva y del pescado azul) beneficiosas para prevenir el aumento del colesterol y las enfermedades cardiovasculares. Las frutas, verduras, legumbres… tienen un alto contenido en fibra (beneficiosa para el transito intestinal), vitaminas (que ayudan a prevenir enfermedades respiratorias), minerales y otros antioxidantes (que evitan el envejecimiento celular). Se ha comprobado incluso que esta dieta reduce el riesgo de padecer algunos tipos de cáncer.

Por otro lado el consumo moderado de vino reduce la incidencia de enfermedades cardiovasculares ya que contiene un antioxidante (el resveratrol) que protege el corazón y evita el envejecimiento celular. Eso si…..mejor si solo tomamos una copita con cada comida.

Si alguien tiene dudas sobre las excelencias de este tipo de dieta baste decir que tras una candidatura presentada conjuntamente en 2003 por España, Italia, Grecia y Marruecos, la UNESCO (Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la ciencia y la cultura) ha decidido en 2010 que la dieta mediterránea sea Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad.